- Tener una esponja o papel de baño para limpiar cualquier color que se pase o cualquier mancha.
- Tener una toalla para limpiar el pincel.
- Poner una esponja al final del recipiente con agua para limpiar el color más fácil.
- Ir de los tonos más claros a los oscuros.
- Aplicar el color en capas y dejarlo secar.
- Ser muy paciente.
- Pintar lo que está más cerca primero y cada vez profundizar más en la pintura.
- En algunos casos es más conveniente pintar el fondo primero, por ejemplo, en un retrato.
- Deja espacios sin pintar para el color blanco.
Referencia: PropiaReferencia de imagen: Hands Paint Brush - Free photo on Pixabay
Referencia: Propia
Comentarios
Publicar un comentario